VIVIENDA UNIFAMILIAR BIO_02 volver a proyectos

trazos-esquema

 

VIVIENDA UNIFAMILIAR BIOCLIMÁTICA

Vivienda unifamiliar bioclimática entre medianeras. Superficie 165 m2 construidos vivienda + 100 m2 sótano.

Se busca la luz natural, la orientación sur,  las vistas pasantes, el control visual de toda la parcela, la ventilación natural y una vivienda pensada para vivir todo el año ( verano-invierno ) con comodidad y confort.

Emplazamiento: 46870 Ontinyent ( Valencia ).

BIOCLIMATISMO.

La edificación ha sido diseñada para tener el mejor comportamiento bioclimático posible, es decir, que el edificio se caliente al máximo por sí mismo en invierno y se refresque al máximo por sí mismo en verano. Todo ello, sin necesidad de artefactos ni energía extra, simplemente por su diseño arquitectónico y sin ningún coste adicional.

ESTRATEGIAS BIOCLIMÁTICAS.

Sistemas de generación de calor.

La edificación se calienta por sí misma en invierno :

  • Evitando enfriarse: debido a su alto aislamiento térmico, y disponiendo grandes superficies vidriadas solo al sur.
  • Debido a su cuidadoso y especial diseño bioclimático, y su orientación sur, la edificación se calienta por efecto invernadero, radiación solar directa y permanece caliente durante mucho tiempo, debido a su alta inercia térmica.

Sistemas de generación de fresco.

La edificación se refresca por sí misma en verano:

  • Evitando calentarse: disponiendo la mayor parte de la superficie vidriada al sur; disponiendo de protecciones solares para la radiación solar directa e indirecta (un tipo de protección diferente para cada uno de los huecos con diferente orientación) y disponiendo un aislamiento adecuado.
  • Cediendo calor al terreno. La edificación se encuentra parcialmente enterrada, lo que le permite tener una temperatura fresca y estable todo el verano.
  • Mediante un sistema de enfriamiento arquitectónico de aire por medio de galerías subterráneas.  El aire de ventilación exterior entra a la edificación a través de unas galerías subterráneas. Al recorrer todas estas galerías, el aire cede todo su calor al terreno, y entra fresco al interior del sótano. En el sótano vuelve a refrescarse por radiación inversa y asciende a la primera planta. De este modo, el aire recorre la vivienda, refrescándola a su paso.
  • Acumulando el fresco de la noche. Debido a la alta inercia térmica del edificio, el fresco acumulado durante la noche en verano se mantiene durante la práctica totalidad del día siguiente.
  • Extrayendo el aire caliente al exterior de la edificación, a través de las ventanas superiores d e la cristalera de la fachada sur. El aire del interior de la edificación se va calentando a lo largo del día, y por ello se hace menos denso y asciende. Por otro lado, las ventanas situadas en la parte inferior de la fachada norte potencian la convección natural y proporciona un eficaz “efecto chimenea” para extraer el aire caliente del interior de la edificación. De este modo se genera una corriente de succión, que extrae en todo momento el aire recalentado de la edificación y la mantiene fresca.

Sistemas de acumulación (calor o fresco).

El calor generado durante el día en invierno se acumula en los forjados y en los muros de carga (de alta inercia térmica), manteniendo caliente la edificación durante la noche. Del mismo modo, el fresco generado durante la noche en verano se acumula en los forjados y en los muros de carga, manteniendo fresca la edificación durante el día. La cubierta ajardinada de alta inercia térmica, refuerza este proceso.

Sistemas de transferencia (calor o fresco).

En invierno la edificación se comporta como un invernadero. El calor generado por efecto invernadero y radiación natural se reparte en forma de aire caliente por toda la edificación. El calor acumulado en los muros de carga se transmite a las estancias por radiación.

En verano, el aire fresco generado en las galerías subterráneas se reparte por la edificación por medio de un conjunto de rejillas repartidas en el forjado. Ésta corriente de aire refresca todas las estancias de la edificación.

Ventilación natural.

La ventilación de la edificación se hace de forma continuada y natural, a través de los propios muros envolventes, lo que permite una ventilación adecuada, sin pérdidas energéticas. Este tipo de ventilación es posible ya que todos los materiales utilizados son transpirables (cerámica, aislamientos naturales, morteros de revestimiento y  pinturas orgánicas).